El campeón japonés Kazuto Ioka sufrió una clara derrota por decisión unánime de 3-0 ante el argentino Fernando «Puma» Martínez en la pelea de unificación de los títulos mundiales de peso super mosca de la WBA e IBF realizado en el Ryogoku Sumo Arena en Tokio.
Martínez, campeón invicto de Argentina, ostenta ahora los cinturones de la IBF y la WBA en la categoría de peso super mosca tras vencer al campeón japonés que no perdía una pelea desde hace cinco años.
La puntuación de los jueces reflejó lo ocurrido en el ring: 120-108, 117-111 y 116-112, todo a favor de Martínez.
La pelea fue una batalla épica entre dos campeones mundiales que no trabaron el combate en ningún de los 12 asaltos pactados.
El argentino fue una máquina de golpear, agresividad que impidió a Ioka organizar su ofensiva y construyó un muro defensivo que el japonés nunca logró superar. «(Ioka) Es un campeón de campeones. Se notó el nivel, la experiencia y los cuatro títulos que ganó», dijo Martínez al acabar la pelea.
«Tiré con todo mi poder, tiré todo y siempre estuvo parado. Dimos una batalla que era lo que yo quería, para que toda esta gente (que vino) se vaya muy feliz, porque la gente quiere ver guerra», añadió el campeón argentino.
La brillante pelea de Martínez ante una leyenda del boxeo japonés y mundial lo ha convertido en un boxeador de élite y lo está encaminando a retos históricos.
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