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CELEBRACIONES DE AÑO NUEVO EN JAPON

El 1 de enero simboliza alegría y felicidad en Japón, por eso los hogares están decorados con pinos, bambúes y ciruelos para celebrar el año nuevo.


Es tradición que las personas comiencen el año viendo el primer amanecer “Hatsuhinode” junto a amigos y familiares quienes visitan lugares de gran altura para apreciar el amanecer del 1 de enero.


Otra costumbre popular es el “Hatsumode” o la primera visita a un santuario o templo en donde los japoneses hacen las primeras plegarias del año y compran nuevos amuletos.


La gastronomía también se destaca en las celebraciones del año nuevo. Los japoneses tienen varios platos especiales para “Shogatsu”. El más destacado, es el “osechi ryori”, consiste en una variedad de coloridos platos que vienen en cajas especiales (jubako) muy similares a las del bento. Cada plato tiene un significado especial para dar la bienvenida al nuevo año y se consume en los primeros tres días de enero.

También es tradicional comer “toshikoshi soba” (fideos de sarraceno) para la longevidad, “kagami mochi” (pastel de arroz), “ozoni” (sopa con mochi) y “otoso” (vino de arroz endulzado).


“Osoji” es la tradición japonesa de la limpieza en casas y oficinas antes del 31 de diciembre para sacar todas las “energías viejas”. Tras realizar esto, los japoneses acostumbran a decorar sus hogares. Las más importantes son: “Kadomatsu” (un adorno hecho con ramas de pino y cañas de bambú que se colocan en las entradas de los hogares para atraer la abundancia y prosperidad) y “Kagamimochi” (un pastel hecho de masa de arroz glutinoso que tiene una naranja amarga conocida como “daidai” y se coloca en el altar familiar en la casa).


“Otoshidama” es la costumbre de dar a los niños un sobre con dinero como regalo para el año entrante como manera de reconocer el esfuerzo realizado en el año finalizado y como deseo de un nuevo año con felicidad y alegría.


“Shinnen-kai” o celebración de año nuevo, es el encuentro entre amigos o compañeros de trabajo donde se come, se bebe y se desea buena suerte para el año entrante y se renueva el compromiso laboral o de amistad.


El 2 de enero el emperador del Japón sale al balcón junto a la familia imperial para saludar al pueblo por el año nuevo. En esta fecha se abren los jardines del palacio imperial al público donde asisten miles de ciudadanos con banderas japonesas para escuchar su mensaje.


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