El gobierno japonés tiene previsto ampliar un plan para ayudar a las parejas de recién casados, en donde entregarán hasta 600.000 yenes (5.700 dólares) para iniciar una nueva etapa de sus vidas. La medida entrará en vigencia en el año fiscal 2021.
Las razones que motivan a esta ayuda son varias, aunque se destacan: el año pasado nacieron en Japón aproximadamente 865.000 bebés (un mínimo histórico) y casi el 30% de su población tiene 65 años o más.
En un país que año a año registra menos habitantes y envejece aceleradamente, promover la natalidad es un asunto de Estado.
Para recibir este apoyo económico, los integrantes de las parejas deberán tener menos de 40 años y un ingreso combinado por debajo de 5,4 millones de yenes (51.600 dólares) anuales.
Actualmente, para recibir un beneficio de hasta 300 mil yenes ambos deben tener menos de 35 años y poseer ingresos inferiores a 4,8 millones de yenes (45.900 dólares).
Además, deberán residir en una ciudad o pueblo cuyo municipio aplique el programa gubernamental de ayudas.
Cabe señalar que el dinero no es un problema menor para formar matrimonio en Japón. Un estudio realizado en 2015 por el Instituto Nacional de Investigación sobre Población halló que el 29,1 % de los hombres solteros de 25 a 34 años y el 17,8 % de las mujeres solteras de la misma franja etaria no se casaban por el dinero faltante.
