Japón conmemora el 28.º aniversario del Gran Terremoto de Hanshin-Awaji, en el que murieron 6.434 personas.
El devastador sismo, que ocurrió el 17 de enero de 1995, sacudió la prefectura de Hyogo y áreas cercanas en el oeste del país, provocando el derrumbe de numerosos edificios e incendios a lo largo y ancho de las zonas afectadas.
Durante una ceremonia conmemorativa en el Parque del Este de Kobe se encendieron aproximadamente 10.000 faroles, a los que se dispuso para que formaran los números 1 y 17, y la palabra “musubu”, que significa vincular en japonés.
Las autoridades esperan que esos actos contribuyan a acercar a las generaciones a fin de que se transmita a los jóvenes lo aprendido tras el desastre.
Los participantes guardaron un minuto de silencio a las 5:46 a. m., la hora exacta en que ocurrió el terremoto.
La escala de la ceremonia anual se redujo desde la irrupción de la pandemia de coronavirus. Sin embargo, este año los organizadores decidieron volver al formato prepandémico, encendiendo el doble de faroles que los utilizados el año pasado.
No obstante, Hyogo debe hacer frente a la difícil tarea de mantener vivo el recuerdo del desastre.
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