Después de dos años de pandemia, los japoneses están disfrutando de la temporada de los cerezos en flor.
Los árboles están florecidos en muchas partes del país. Se trata de uno de los grandes atractivos turísticos del Japón en el comienzo de la primavera.
En el Parque Chidorigafuchi, ubicado en Tokio cerca del Palacio Imperial, miles de personas contemplan los pétalos color de rosa pálido mientras pasean bajo los árboles o desde botes de remos en el foso del palacio.
Algunos de los principales puntos de interés turísticos son el parque de Ueno, que cuenta con 1.200 cerezos y el parque de Hibiya.
Según la Organización Nacional de Turismo de Japón (JNTO) se trata de uno de los máximos atractivos para la llegada de turistas en esta época del año y la convocatoria suele superar 1,5 millones de visitantes.
Cabe señalar, que la flor del cerezo o “sakura”, la preferida de los japoneses, alcanza su pico entre fines de marzo y comienzos de abril, en momentos que comienza el año escolar y de los negocios.
