La Villa Olímpica de los Juegos de Tokio 2020 abrió sus puertas diez días antes de la ceremonia de apertura de la cita deportiva. A diferencia de otras Olimpiadas, no se celebró ningún acto especial para recibir a las delegaciones debido a las medidas que se están tomando contra el coronavirus.
El lugar, situado en el barrio tokiota de Harumi, está adecuado para acoger a un máximo de 18.000 personas, entre deportistas, entrenadores y demás personal. Como parte de las medidas anticontagio, los deportistas deben limitar su estadía en la villa y solo pueden instalarse allí cinco días antes de que empiecen a competir. Una vez que termine su participación, deberán marcharse de la villa en un plazo de dos días.
En Juegos anteriores, los deportistas de todo el mundo podían socializar y entrar y salir libremente, pero en esta ocasión solo se les permite ir a las sedes olímpicas, entre otros lugares necesarios. Está prohibido que salgan a hacer turismo, compras o a comer fuera.
También se ha limitado el número de personas que acceden a la Villa Olímpica
Cuando los deportistas estén entrenando en los gimnasios o en cualquier otro sitio de la villa deberán llevar mascarilla. Además, tendrán que guardar una distancia de dos metros los unos de los otros cuando estén en el comedor principal y tratar de comer solos en la medida de lo posible.
Podrán llevar alcohol a sus habitaciones, pero no se les permitirá consumirlo con otras personas en zonas comunes.