El príncipe heredero Akishino y la princesa heredera Kiko asistieron el pasado 6 de mayo a la coronación del rey Carlos III de Gran Bretaña en la Abadía de Westminster en Londres, la primera vez que asisten a la coronación de un monarca extranjero.
La pareja imperial se sentó con otros miembros de la realeza en la ceremonia, el príncipe heredero Akishino vestía un esmoquin negro y la princesa heredera Kiko un kimono rosa claro. Vieron cómo el rey Carlos se ponía la tradicional corona real británica, un símbolo de su posición, en medio del canto de un coro.
Después de la ceremonia, el príncipe heredero y la princesa regresaron a sus alojamientos en Londres. “Fue una ceremonia muy solemne y alegre. La música también fue maravillosa”, dijo el príncipe heredero a los periodistas.
El Emperador y la Emperatriz enviaron un telegrama al Rey Carlos el sábado expresando sus felicitaciones, según la Agencia de la Casa Imperial.