Por primera vez en dos años, el monte Fuji, la montaña más alta de Japón, vuelve a recibir a los senderistas.
Ya se habilitó el acceso a un sendero que comienza en la prefectura de Yamanashi y parte de otro que comienza en la de Shizuoka.
Se mantuvieron cerrados durante la temporada de ascenso del verano boreal pasado debido a la pandemia de coronavirus. Era la primera vez desde 1988, año desde que se tiene registro, que se cerraba el paso durante la temporada completa.
Se pedirá a las personas que se detengan en el estacionamiento ubicado al comienzo de la autopista de peaje Fuji-Subaru Line para presentar formularios que describan su estado de salud y tomarles la temperatura en el momento.
En principio se pedirá, a los senderistas que deseen alojarse en las cabañas de los senderos, que hagan reservas. Estas funcionarán a cerca del 50 por ciento de la capacidad para mantener el distanciamiento físico. También se incluirán otras medidas contra contagios, como el uso de separadores y ventilación.
